Rutinas creativas y comunidades de prácticas en el sector público
Abstract
El ensayo tiene el propósito de incentivar el debate y la reflexión en torno a nuevas formas de organización en el sector público que garanticen una mejor gestión y, por supuesto, que generen valor público. Parto señalando que las ganancias en rendimiento y productividad en el sector público se pueden conseguir gestionando mejor su conocimiento. Tal como ocurre en las empresas en la economía del conocimiento, la generación de riqueza está asociada al buen uso que se haga del conocimiento. Ello también es válido para el sector público. Destaco luego la necesidad de la innovación constante basada en la utilización del conocimiento. La innovación pública tiene dos componente. Uno, el uso del conocimiento para la mejora continua. Y, el segundo, es la generación de un contexto que propicie la maximización de su uso. La creación de ese contexto debe partir del reconocimiento que son las personas quienes tienen el conocimiento. Por tanto, la potenciación de éste no puede hacerse sin contar con los incentivos que permitan que se cree y fluya entre las personas de la organización. El contexto que, desde mi punto de vista, facilita que ello ocurra son las Comunidades de Práctica. Estas se yerguen, en consecuencias, como nuevas unidades organizativas en la administración pública que permiten la creatividad y la innovación. Abordo, en ese sentido, las características de las Cops y las utilidades que genera para las organizaciones públicas. Éstas parten de la condición de que las personas despliegan su creatividad innata. De ahí que me pregunto cómo surge la mente creativa. Termino este ensayo con una plateando hipotéticamente 10 ideas sobre cómo generar innovación en el sector público.