Gestión de la innovación para la motivación de las personas

Abstract

Hay un beneficio indirecto, no tangible pero sí apreciable, de innovar: la motivación que se genera en los equipos de trabajo de una organización, sea ésta de carácter público o privado. Ver realizadas las ideas que se proponen o los proyectos que se diseñan tiene efectos positivos en la motivación del personal.

La innovación es, además, una herramienta muy eficaz para aumentar el grado de implicación de las personas. Pensemos en el proceso de las políticas públicas: si el protocolo de implementación se transmite como una instrucción unidireccional desde el área directiva, el compromiso por los buenos resultados es menor que el que se generaría si los responsables de ejecutarla hubieran participado en el proceso de discusión y toma de decisión. Brindar a los empleados públicos la oportunidad de desarrollar su creatividad y talento beneficiaría a las organizaciones y, por ende, a los ciudadanos.

Lamentablemente, en la actualidad, la cultura de las administraciones públicas iberoamericanas no constituye un marco que permita la introducción y consolidación de esta línea de pensamiento. El miedo al cambio y a la responsabilidad que, de forma intrínseca, llevan consigo los procesos de innovación, constituyen importantes barreras para este tipo de iniciativas.

Esta ponencia intenta sensibilizar sobre las ventajas de innovar, incorporando activamente a los funcionarios públicos en la definición, priorización y solución de los problemas a los que se enfrentan día a día en el desempeño de sus labores. Así pues, se aborda la relación entre innovación y motivación, reflexionando sobre el contexto y cambio cultural que debe fomentarse para que ambos conceptos se traduzcan en servicios públicos de mayor calidad para los ciudadanos.