La transparencia en México: ventajas y desventajas
Resumo
Este documento pretende analizar el tema de la Transparencia como una herramienta fundamental de la nueva gestión pública y como se ha venido desarrollando en el Estado mexicano. Lo cual a lo largo de casi una década ha traído una serie de ventajas en el ejercicio de la administración pública, pero también desventajas al implementar esta herramienta, pues si bien es cierto ya se han realizado varias acciones sobre el tema, todavía existen lagunas e irregularidades al momento de su operación que no acaba por convencer a la sociedad mexicana. Pues bien, dicho documento primero pretende dar un concepto del tema con la opinión de diferentes expertos del mismo, como; Vergara, Pertuzé, Uvalle, Schedler entre otros. Todos coincidiendo en que; cuando se habla de transparencia en el gobierno se refiere a organizaciones públicas que informan a la sociedad sobre sus criterios de decisión, sus procesos, sus rutinas y sus resultados, para hacer de dominio público la información de los recursos y los bienes del Estado y poner en práctica la evaluación de las políticas públicas que están bajo la responsabilidad de los funcionarios públicos y que esta información este bajo la percepción y vigilancia de los ciudadanos para evitar que el gobierno se comporte de modo distante. En este sentido podemos ver de acuerdo con los expertos, como desde el siglo XX hasta la actualidad, la transparencia se ha convertido en un tema fundamental para los países desarrollados, los cuales cuentan con mecanismos eficaces para hacer de sus funcionarios entes que brinden información a la ciudadanía, y con ello, ésta haga que respondan por sus decisiones y actos. En América Latina se empiezan a gestan al margen de los avances democráticos, que fueron el resultado de la marcada desigualdad social, crisis económicas, y corrupción. Todos estos hechos marcaron un punto de ruptura, en el cual, la sociedad comienza a demandar resultados del sector gubernamental. Es aquí donde comienza a nacer la rendición de cuentas de manera formal, y con esta, una de sus principales herramientas, es decir, la transparencia. Una vez analizado el concepto veremos como se ha implementado esta herramienta en México, en donde al parecer siempre se ha quedado en la parte informativa y eso con muchas interrogantes, como por ejemplo; los distintos informes de gobierno que se presentan cada año de gestión, cuando en realidad es la enumeración de obras y acciones que han hecho a lo largo de ese año y no se ha avanzado mucho en otras cuestiones donde no existe la argumentación de las razones y las formas que justifiquen los actos que realizan. Así pues, veremos como en México la desconfianza en la administración pública mexicana por nuestra sociedad fue alimentada por la permanencia de Partido hegemónico por mas de 70 años, el cual generó sistemas de control y seguimiento que propiciaban confusión, problemas con la operación y por lo tanto, la posibilidad de manejar recursos en ocasiones discrecionalmente; lo que repercutió en la pérdida de la legitimidad del gobierno, aumentando la desconfianza en el quehacer gubernamental, así mismo se ve reflejada la incapacidad de los servidores públicos para satisfacer las necesidades y demandas de la sociedad y un aparto burocrático con muchas irregularidades, fomentando prácticas tales como; nepotismo, cohecho, peculado entre otras, solapadas por un excesivo centralismo, lo que confiere un importante obstáculo al desarrollo económico, administrativo y político del país. Fue entonces cuando el país se caracterizó por estar sujeto a las decisiones de un poder central formado por el Presidente de la República y a su gabinete de Gobierno, de tal manera y debido a este centralismo ocasionó que hubiera poca transparencia en la toma de decisiones y que junto con la rendición de cuentas fueran temas que se tenía en muy poca consideración, ya que no tenia caso realizar un trabajo donde el propio gobierno era juez y parte, además de que no había quien exigiera resultados al gobierno. En este sentido vemos como la pérdida de legitimidad gubernamental de nuestra democracia iba en aumento, por lo que se identifica la necesidad de intensificar esfuerzos para contenerla, de manera que sea posible implementar un sistema donde haya reglas claras de competencia, así como mantener las instituciones democráticas dentro de un marco de legalidad y legitimidad que garanticen niveles aceptables de gobernabilidad. Fue entonces con la llegada en el año 2000 de un nuevo partido al poder en el ejecutivo federal; opto como bandera el mecanismo de la transparencia y la rendición para lograr una nueva gobernabilidad, por tal motivo surge la necesidad de contar con un sistema de rendición de cuentas que ayude a mitigar estos abusos de poder. En este sentido se empiezan a realizar una serie de acciones para dar lugar tanto a la instrumentación de nuevas estrategias en favor de la transparencia, como en la creación de instituciones con la promulgación de ordenamientos jurídicos por parte del gobierno federal para fomentar prácticas y mecanismos al interior de las dependencias públicas que permitieron abrir la información gubernamental al ciudadano y darle la oportunidad de incidir y participar en los asuntos públicos. Así el Gobierno Federal ha mostrado mayor interés al implementar una serie de acciones relacionadas con este tema, pero hoy en día la pregunta que habría que responder es; hasta donde todas estas acciones y mecanismos son del todo eficientes y confiables para la ciudadanía, pues como en todo cambio gubernamental surgen complicaciones y riesgos, como; los altos costos económicos, políticos y administrativos, entidades gubernamentales sumamente burocratizadas, ausencia de un buen liderazgo, lagunas jurídicas, y más aun, que estos principios acaben por no dar cumplimiento a sus propósitos de favorecer el conocimiento público de las acciones del gobierno y de reforzar el sentido de responsabilidad sobre sus consecuencias, es decir, que se conviertan en una forma más de simulación en la acción gubernamental. Por ejemplo, piénsese en los costos para supervisar el funcionamiento de la burocracia en México. Por un lado, la Secretaría de la Contraloría ejerce un presupuesto anual de cientos de millones de pesos y en su nómina aparecen cientos de empleados y auditores. Invierte millones de horas-hombre en auditorías, visitas domiciliarias, procesos administrativos y penales, difusión pública, entre otros. Todos éstos son los costos de información para vigilar a la burocracia, por mencionar solo uno, pero estos procesos es parte de lo que conlleva la transparencia, y la transparencia vista como un dispositivo que viene a hacer el contrapeso y así integrar el esquema de una administración sin detalles de un funcionamiento no muy bueno. Ahora bien, por otro lado, implementar la transparencia en la Administración Pública también trae consigo muchas ventajas para el buen funcionamiento gubernamental, tanto en la parte interna de las Instituciones; como mejorar la asimetría de la información para que esta no sea manejada por unos cuantos, además al disminuir dicha asimetría permite una mejor supervisión interna de políticos y funcionarios, previniendo actos de corrupción y con ello la consecuencia inmediata es el mejoramiento de la eficiencia y desempeño de los políticos y de los funcionarios. Por tal motivo la transparencia gubernamental vuelve más eficaz a las instituciones, porque ayuda a que las dependencias del gobierno no sean desviadas de sus objetivos públicos para servir a intereses privados y al no existir desvíos de los objetivos de las organizaciones, se busca la eficiencia y eficacia de las instituciones, así como su mejora continua, y se dejan de lado los "objetivos personales" de los funcionarios públicos, así como la prevención de actos de corrupción. A nivel externo tenemos que la transparencia hace más sensibles a los organismos públicos y privados a críticas por parte de la ciudadanía. Con este hecho se estaría concretando otro aspecto de la rendición de cuentas, donde la sociedad organizada e informada se involucra con las decisiones y acciones de la Administración Pública pidiendo resultados a la misma. En este sentido la rendición de cuentas y la transparencia son sumamente importantes, ambas se complementan para lograr eficientar la actuación del quehacer gubernamental con cambios racionales y culturales, ya que permiten reducir ciertas connotaciones negativas propias de las Administraciones Públicas como la corrupción, la asimetría de la información, la mala coordinación de las entidades gubernamentales entre otras. Pero el tema de la Transparencia pareciera ser un término fácil de aplicar al interior de las organizaciones públicas, y no es así, pues lo de menos es que existan organismos, leyes y programas para fomentarla, pero lo importante es que en verdad se cumpla, y que no existan vacíos en dicha Ley, y el papel de los funcionarios para acopiarse de la ley e integrarla de forma constante a su quehacer administrativo. En este contexto, el presente documento pretende analizar las ventajas que ha traído consigo este modelo, así como las implicaciones que para las estructuras y procesos administrativos representa el emprender estos cambios, pero también las desventajas que impiden que su implementación en algunas entidades gubernamentales sea complicada.