La instauración de instituciones públicas comprometidas : el marco adecuado

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Data
2003-10Autor
Liberman Taratuta, Alejandro Marcelo
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En este documento queremos rescatar la esencia del orden y la norma desde la perspectiva privada y pública. Desde la primera visión deberíamos apuntar a una situación tal, que generemos desde la "nueva gerencia pública", instituciones públicas comprometidas con la cosa pública (IPC). En concordancia con lo anterior, la conformación de ciudadanos responsables, a nuestro modo de ver, se lograría a través de las nuevas generaciones de niños escolarizados con una nueva colación de docentes que sean capacitados fuertemente en pos de lograr nuevos ciudadanos imbuidos, no solo en la instrucción y memorización enciclopédica, sino más bien, en la puesta en foco de los conocimientos hacia las nuevas formas de aprendizaje en interrelación con su suelo y el mundo y la participación conciente ciudadana. Todo ello, revisando estratégicamente las currículas de la enseñanza oficial que monopoliza y perturba, en alguna medida, el desarrollo de avanzada que esperamos de las nuevas generaciones. Las alternativas propuestas no son inmediatas, efectistas, ni de corto plazo. Invariablemente los resultados de la gestión se verán con el avance de los nuevos jóvenes acumuladores de prácticas ciudadanas desde el ingreso al sistema escolar. Esta posición sugiere una acción política incorrecta pero estratégicamente valiosa. Para ello, hemos conjugado tres jerarquías de ciudadanos, con el fin de mostrar donde estamos y adonde queremos llegar. Además hemos explorado en forma coetánea, el cambio institucional de cara a la descentralización a través de comunas, establecida en la constitución, y que todavía no se han puesto en marcha contradiciendo paradójicamente la norma. La puesta en marcha de un proceso descentralizador efectivo, avizora una buena práctica para conseguir que junto con la capacitación de los servidores públicos, se formen redes participativas y de control, que transformen las centralidades públicas en bocas autónomas especializadas y de alcance próximo a los ciudadanos. Hoy, nos encontramos ante un desafío político - estratégico: o formamos ciudadanos responsables e instituciones comprometidas o quedaremos espantados ante la falta de materia y contenido impropios de una comunidad que debe reclamar civilidad.