Estrategias pedagógicas y buenas prácticas organizativas para potenciar el nuevo rol de los funcionarios del siglo XXI como gestores de redes
Abstract
Para poder hacer frente a los retos de la globalización y a la crisis del Estado del Bienestar, las democracias avanzadas han tenido que evolucionar hacia un modelo de Estado Relacional que plantea un nuevo reparto de roles, tareas y responsabilidades entre el Estado, el mercado y la sociedad civil. Y es precisamente en este entorno institucional caracterizado por la "gestión en red" de los servicios públicos donde el estudio de la inadecuación existente entre el perfil competencial de los funcionarios públicos y las competencias profesionales necesarias para ejercer correctamente este nuevo rol de gestores de redes resulta relevante. Esta ponencia se enmarca en el estudio de la relación existente entre dos variables que tradicionalmente se han estudiado por separado (las características del mercado laboral de un determinado país y el modelo de colaboración público-privada existente) y revisa como, en un contexto caracterizado por la colaboración entre agentes públicos y privados, las tareas de planificación, seguimiento y evaluación por parte del personal al servicio de las administraciones públicas cada vez debería representar un peso relativo más importante frente a las tradicionales tareas vinculadas a la propia gestión de dichos servicios y, consecuentemente, como los conocimientos, competencias y habilidades requeridas a los trabajadores públicos deberían cambiar adaptándose a esta nueva realidad. Concretamente, se analizan las preguntas relacionadas con este ámbito de estudio incluidas en un cuestionario más genérico (diseñado en el marco de elaboración de mi tesis doctoral) que se administrará a todos los gestores públicos encargados de liderar la firma de contratos de colaboración entre el sector público y el sector privado firmados por el conjunto de las Administraciones públicas españolas desde el año 2007. A continuación, se plantean los posibles efectos de constatar o refutar un listado de hipótesis planteadas en base a estas preguntas por cada uno de los subsistemas de gestión de los recursos humanos y otras variables relevantes relacionadas con la configuración de las políticas de recursos humanos en las Administraciones públicas. El objetivo último perseguido es doble: definir el perfil competencial de los funcionarios públicos y las competencias profesionales necesarias para que éstos puedan ejercer correctamente este nuevo rol de gestor de redes y diseñar estrategias pedagógicas y buenas prácticas organizativas que permitan que los funcionarios públicos efectivamente desarrollar estas competencias imprescindibles para mejorar el actual rendimiento institucional de las administraciones públicas.