Hacia un enfoque sistémico para fortalecer los procesos de conducción política de las organizaciones públicas

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Data
2010-11-09Autor
Babino, Luis Guillermo
Carpinacci, Luciana Inés
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En la actualidad existe la preocupación por mejorar la calidad de la gestión pública. Esta inquietud no es nueva, en los noventa las administraciones públicas latinoamericanas pusieron en marcha reformas de segunda generación, con modelos de gestión vinculados a resultados y mejoras de los sistemas administrativos con fuertes inversiones en tecnología. Estas inversiones en algunos casos modernizaron los procesos de gestión de las organizaciones, pero no alcanzaron para lograr una mejor respuesta sistémica de los Estados a las demandas ciudadanas. Las inversiones en tecnología no fueron acompañadas por esfuerzos para mejorar los sistemas de alta dirección gubernamental. La Política no fue reconocida como un actor que necesite y demande fortalecimiento. Hoy en día existe un reconocimiento de la necesidad de fortalecer el alto gobierno, a nivel de las Oficinas de Presidencia, Ministros y Secretarios de Estado. Una estrategia para sostener la mejora en la calidad de estos ámbitos es contar con Oficinas de Gobierno potentes en todas las organizaciones públicas, que de forma recursiva ascendente-descendente tomen decisiones para sostener la calidad de la producción gubernamental. Esto demanda la instalación de herramientas y dispositivos para la toma de decisiones en el ámbito de la Oficina del Gobernante y de procesos de formación orientados a fortalecer sus capacidades para el diseño, implementación y evaluación de políticas públicas. El enfoque propuesto para fortalecer el proceso de toma de decisiones en la Oficina del Gobernante se basa en una visión sistémica de la gestión de gobierno basada en la rendición de cuentas por compromisos, que fortalezca prioritariamente la función de direccionalidad estratégica y la función de control-evaluación, y garantizar a su vez que éstas funciones logren una buena articulación con la asignación de recursos a prioridades de la gestión y con el diseño de un aparato público adecuado para cumplir con los objetivos de la gestión política.