Municipio y gestión ambiental
Abstract
Desde la sociedad civil hay un crecimiento de la conciencia pública en los temas referidos a la conservación del entorno, a través de organizaciones no gubernamentales, demandando cada vez más protagonismo y participación en la gestión ambiental. El Estado también demuestra una conducta ecologista. No obstante haberse incorporado los derechos sobre el ambiente en la Reforma de la Constitución Nacional no se obtiene una línea de continuidad institucional. Es preciso contar con una normativa sistematizada y buscar mecanismos de acción conjunta entre gobiernos y sociedad para abordar la problemática. Los municipios como células primarias poseen un papel fundamental en generar y recepcionar las inquietudes y fomentar la participación en temas relacionados con el hábitat y los recursos naturales. La necesidad de ajustar las estructuras estatales a los cambios sucedidos en las últimas décadas ha llevado a los gobiernos a ensayar nuevas fórmulas que fortalezcan la participación ciudadana. En la provincia de Mendoza, la preservación del ambiente no es un hecho coyuntural, sino el resultado de un largo proceso cultural, de transformación de una zona desértica en oasis propicios para el desarrollo productivo, social y político, a través de la economía del recurso agua. Por lo cual, desde el siglo pasado se comienza con una sostenida política de preservación del hábitat, que se concreta con una variada normativa que regula el uso de los diferentes recursos naturales. En 1993 se sanciona la Ley 5961 "Preservación del medio ambiente", por la cual se delinean los principios de una política ambiental, determinando que el P.E. provincial y los municipios garantizarán en sus actos de gobiernos los principios de un desarrollo sostenido y asegurar a la comunidad el derecho de gozar de un ambiente ecológicamente equilibrado. Es de destacar el capítulo dedicado a la evaluación del impacto ambiental, en donde las comunas tienen una prioritaria intervención. En el marco de esta ley sobre el ambiente y teniendo presente la creciente necesidad de participación de la ciudadanía, como así también buscar nuevas formas de gobierno conjuntamente con la actividad privada para encarar obras necesarias para la satisfacción de necesidades, sin perjudicar el entorno, es que se analiza la construcción del Acueducto del Oeste: Proyecto Hipocampo. Se ha constituido una sociedad entre empresas privadas de la provincia y los municipios involucrados en la zona del pedemonte (Ciudad de Mendoza, Godoy Cruz, Las Heras y Luján de Cuyo), por la cual las empresas locales, autoras del proyecto, se harán cargo de la construcción de la obra con la garantía de inversiones internacionales y la fiscalización de los municipios. La obra está destinada a solucionar el problema de abastecimiento de agua potable en la zona del pedemonte mendocino, a dotar de una red de cloacas para la industria, tratamiento del agua para el agro. La propuesta es urbanizar el pedemonte, generar trabajo genuino y conformar un fondo inmobiliario para la construcción de viviendas. Los municipios entienden que la realización de este proyecto es vital para el desarrollo urbano del pedemonte. Por su parte las empresas consideran muy acertado que las comunas integren la estructura empresaria, ya que son los responsables directos a la luz de las leyes y la Constitución del desarrollo de la zona.