Las relaciones de poder en el ciclo de políticas públicas: el caso de Chile
Resumen
Las reformas implementadas en Chile durante los noventa se centraron en lo que podemos nombrar como una tradición formalista de la acción pública, calculada sobre la base de una sectorialización sin interés explícito por la generación de sentidos compartidos. Sin embargo, hoy para el caso chileno, este proceso comienza a ser percibido como una fase que se agota. Este aparece vinculado, a la vez, al cumplimiento de los objetivos propuestos para la consolidación democrática y a la percepción de que la racionalidad funcional del tipo de gobernabilidad adoptada por la transición chilena, que fue justamente la que permitió cumplir con las metas, no ha sido suficiente para generar adhesiones, interpretar de modo eficiente la subjetividad de la ciudadanía o acoger sus demandas de integración. Se hace cada día más explícito el hecho de que el proceso político chileno de los últimos años ha privilegiado el factor gobernabilidad por sobre el componente representación, donde la idea de gobernabilidad está asociada básicamente a la eficacia de la acción estatal cuyos rasgos centrales fueron definidos durante la década del 80.