Factores ausentes en el diseño y gerencia de la política social venezolana
Abstract
En este trabajo se analizan dos aspectos generalmente no tomados en cuenta en el diseño y gerencia de la política social venezolana, pese a su incidencia en el bajo impacto de ésta en el bienestar social de la población destinataria: 1) el seguimiento-evaluación del proceso real de ejecución vs. el proceso formal normativo de los programas compensatorios que constituyen el núcleo de la política instrumentada en el período 1989-1997, y 2) la actitud de los beneficiarios de la misma. El proceso de ejecución se evalúa en función de las siguientes dimensiones: la estructura organizativa; la estrategia operativa; los sistemas de información y los mecanismos de difusión; supervisión, control y seguimiento; la cobertura geográfica y social; el personal, recursos físicos y financieros; y la eficacia de la estrategia o cumplimiento de metas. Dentro del término actitud se incluye: el nivel de conocimiento o de información que los beneficiarios tienen de los programas, su opinión sobre el impacto de éstos en sus condiciones de vida, su reacción más frecuente (aceptación, rechazo, indiferencia) ante cambios parciales o definitivos de los programas y las formas de participación en los mismos. El análisis se realiza a partir de un caso de estudio: la dinámica de la Estrategia PAMI (mejor conocido como Programa Ampliado Materno Infantil), uno de los programas de mitigación de pobreza de mayor cobertura geográfica y social de Venezuela; en el Estado Zulia, una de las diez entidades con mayores índices de pobreza. El objetivo básico es insistir en la necesidad de diseñar y evaluar integralmente tales subsidios, incorporando estos aspectos decisivos, y propiciar un estilo de gestión pertinente entre los decisores superiores, cuyo punto de partida ha de ser una reflexión en torno a los riesgos de mantener indefinidamente la política social asistencialista-compensatoria, que reclama redefiniciones ante su escasa efectividad y ante la realidad social del país, caracterizada por la generalización de la pobreza. Los hallazgos revelan respecto al proceso de ejecución serios obstáculos , muchos de los cuales tienen que ver con poblemas de tipo gerencial; y sobre la actitud, un marcado desconocimiento entre los beneficiarios respecto a los programas, así como opiniones, expectativas y reacciones pasivo-conformistas y nula participación, cónsonos con el acostumbramiento a la cultura clientelar fomentada por el Estado venezolano.