Proceso de certificación de programas universitarios de formación de directivos públicos chilenos, en el marco del proceso de modernización y reforma del Estado
Resumen
El desafío de la modernización de la gestión pública tiene por principal objetivo alcanzar una gestión de los servicios cada vez más eficaz, eficiente, participativa y transparente. En ese contexto, resulta necesario fortalecer las destrezas y conocimientos de los recursos humanos responsables de tal gestión, para lo cual el Proyecto de Reforma y Modernización del Estado de Chile consideró como línea de acción fundamental, la formación de directivos públicos. La opción del gobierno ha sido privilegiar la participación activa de instituciones externas al Estado, favoreciendo la creación de una oferta diversa y competitiva de programas de formación de directivos públicos en las instituciones de educación superior chilenas. Asimismo, con el objeto de garantizar la pertinencia y calidad de dichos programas a los requerimientos del Estado, se ha considerado un mecanismo independiente de evaluación y certificación, con reglas y procedimientos claros. El sistema de evaluación y certificación de los programas de directivos públicos desarrollado ha tenido por criterio central la identificación de un conjunto de necesidades del Estado, a partir de las cuales se constituye un perfil mínimo basado en habilidades y conocimientos que deben ser adquiridos por los directivos públicos. El desarrollo de este perfil en los programas permitirá potenciar el desempeño eficaz y eficiente de los directivos públicos, en el marco del proceso de modernización del Estado. Durante los años 2001 y 2002, el Proyecto de Reforma y Modernización del Estado del Ministerio Secretaria General de la Presidencia junto a la Comisión Nacional de Acreditación de Pregrado, del Ministerio de Educación invitaron a todas las universidades autónomas del país, en alianzas con centros académicos y consultoras, a presentar propuestas de programas de formación que respondieran al perfil de habilidades y conocimientos asociados al tipo de directivo público que responda a los requerimientos de un estado moderno. La respuesta de estas instituciones a la convocatoria fue ampliamente satisfactoria. Se presentaron más de 80 propuestas y, luego de rigurosos procesos de evaluación y calificación, se ha certificado la pertinencia y calidad de 32 programas de formación de directivos públicos que actualmente ofrecen distintas universidades de chilenas. Se trata de un conjunto de programas que, respondiendo al perfil mínimo definido, constituyen una oferta formativa destinada al perfeccionamiento de recursos humanos orientados a mejorar significativamente la gestión pública.