Reformas y modernización del Estado : experiencias y desafíos en la Provincia de Mendoza
Abstract
La reforma del Estado es una problemática actual en la Provincia de Mendoza y estratégica para su gobierno. A su impulso han contribuido la fuerte y decidida voluntad política liderada por el propio Poder Ejecutivo, un progresivo consenso dentro de la compleja trama de grupos y sectores políticos, sociales y económicos -existen niveles variables de consenso, no unanimidad- y también el rol que ha jugado el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) con quien el gobierno trabaja desde fines de 1995 un programa de apoyo a la reforma del sector público provincial, que comenzará a ejecutarse en los primeros meses del próximo año. El gobierno de Mendoza, después de casi ocho años de acciones y experiencias puntuales y sectoriales realizadas por gestiones anteriores del mismo signo partidario, ha decidido iniciar un proceso de reforma y modernización integral y continuo que atraviese horizontalmente su plan de gobierno. Existe un acuerdo generalizado sobre las debilidades del sector público de la Provincia y no hay demasiado ánimo, tiempo ni espacio para seguir deliberando. La gente sólo desea que se hagan las transformaciones necesarias, que no generen mayores perjuicios y dificultades para ella y sí beneficios tangibles inmediatos. En la propia dinámica del proceso hay una suerte de contradicción o de conflicto permanente entre las ideas-valores y las urgencias y necesidades en juego. Por un lado el absoluto convencimiento de que la reforma estatal es una problemática que ha llegado para quedarse, sujeta a cambios culturales que no responden a un simple acto de voluntad y, en especial, junto a la crisis del Estado-nación, que parece destinado a mudar definitivamente sus atributos más sustantivos y aceptar las fuertes presiones de factores como la innovación científico-tecnológica y la globalización. Y por otro, la necesidad inmediata -derivada del mismo proceso de búsqueda y preservación del poder- que exige concluir el proceso reformista en algún momento para mostrar resultados visibles, tangibles y efectivos. Por eso, tan importante como tener una concepción es la definición aunque sea implícita, de la estrategia de reforma. En síntesis se está desarrollando un Plan de Gobierno en clave de reforma; con funcionarios que tienen que ejecutar simultáneamente el plan y las transformaciones; que tienen que obtener resultados a lo largo del proceso porque las instancias electorales no esperan y bajo condiciones en las que no todo se puede realizar con fórmulas análogas, ni por los mismos caminos ni a la misma velocidad. En este contexto, el documento intenta resumir algunas de las experiencias sobre la reforma del estado provincial. El propósito es organizar en torno a tres interrogantes centrales diversas reflexiones derivadas de la práctica cotidiana de un proceso ya en marcha: 1) ¿Cómo hemos avanzado hasta ahora en términos de características o particularidades del proceso? 2) ¿Cómo hacer para seguir avanzando? y 3) ¿Cuáles son las incógnitas, las dudas y los desafíos que se plantean en el futuro mediato? W.J.C.