La reforma del sistema financiero venezolano y el apoyo a la microempresa : desafíos y opciones
Fecha
2001-11Autor
Villegas de Aizpúrua, Esmeralda
Borgucci García, Emmanuel
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Durante las ultimas décadas, muchos programas de apoyo a la pequeña y microempresa se han diseñado en América Latina con el propósito de canalizar fondos a los estratos más pobres de la sociedad. Este enfoque obedece, en parte, a la observación de que este numeroso segmento de la población depende de las microempresas. La experiencia ha demostrado que el principal obstáculo para la promoción de la microempresa no es la escasa oferta de recursos, sino más bien la falta de instituciones manejadas eficientemente, capaces de ofrecer servicios de calidad a miles de microempresarios en forma rentable y permanente. El objetivo de la ponencia consiste en analizar las reformas al sistema financiero venezolano a partir de la crisis financiera de 1994 en especial el Nuevo Marco Legal para la promoción y desarrollo de las Microfinanzas aprobado en el año en curso. Se concluye que el mercado financiero venezolano ha evolucionado hacia un esquema de mercado de concurrencia contestable y que frente a la concentración bancaria se verifica un proceso de atomización en el sector publico financiero. El nuevo esquema de financiamiento microfinanciero propuesto se enfrenta con una serie de problemas por resolver como son la dependencia de las aportaciones presupuestarias que serian entregadas a una serie de agentes, asimismo estaría afectado por el principio de costos no recuperables, y por la asimetría de información. Se plantea la necesidad de promulgar una Ley Especial sobre operaciones de crédito o de empresas financieras (ley de Microempresas), que favorezca a la pequeña empresa sin dejar a un lado que sus administradores deben respetar los principios fundamentales que guían toda operación de intermediación y que permita entre otras cosas: la continuidad, la neutralidad, la eficiencia, el tratamiento igualitario tanto a los demandantes de financiamiento actuales como a los potenciales, garantizar la equidad social, viabilidad financiera y sencillez en la tramitación, liquidación y recuperación de créditos. Lo anterior implica la necesidad de atención a una intermediación financiera completa, que considere tanto el crédito, como los mecanismos de pago y de ahorro para los microempresarios. Mucho dependerá de la capacidad y la voluntad política del equipo de gobierno para lograr que el microcrédito sea un objetivo de complementación del sistema financiero tradicional y no como un proyecto social aislado.