La violencia laboral en la administración pública central argentina : impactos y funcionalidad
Resumo
La urgente responsabilidad de promover y contribuir a la configuración de un gobierno más efectivo y menos costoso, requiere la tarea ineludible de reflexionar en torno a la cultura del lugar de trabajo en la función pública. En el mismo contexto temporal, los organismos internacionales de salud pública, reconocen a la violencia como una prioridad de salud pública y un obstáculo para el desarrollo de las naciones. En informes especializados la violencia asoma como una epidemia soslayada, que pronto superará a las enfermedades infecciosas como causa principal de morbilidad y mortalidad prematura en todo el mundo. La Organización Mundial de la Salud y el Banco Mundial estiman que los actos de violencia contribuyen al 15% de la carga mundial de enfermedad, pero resaltan la inexistencia de indicadores adecuados para medir su impacto total. Frente a este vacío de conocimiento, la conceptualización, medición y análisis de las conductas violentas en diferentes contextos y la comprensión de sus causas y factores asociados, fueron establecidas como tareas urgentes encaminadas a orientar las acciones de salud pública en lo referente a la prevención de la violencia y a la atención de las víctimas y agresores. Para ello, la promoción y realización de investigaciones y el mejoramiento de los sistemas de información y registro, resultan prioritarios. Al mismo tiempo, el abordaje del fenómeno de la violencia en el trabajo, convoca la atención de los expertos de Europa y Estados Unidos, desde hace sólo una década. En este sentido, mi trabajo de investigación "Violencias en la Administración Pública: Casos y Miradas para pensar la Administración Pública Nacional (Argentina) como ámbito laboral", se propuso analizar un territorio poco explorado desde la perspectiva del análisis de las conductas violentas en el trabajo. El estudio de campo, me permitió verificar que la conducta violenta es perpetrada, en democracia y en las instituciones estatales, por quienes tienen la responsabilidad social y legal de proteger a todos los ciudadanos, de mantener el orden en su mundo, de preservar la estabilidad y predictibilidad de sus vidas. La transformación del carácter protector en carácter violento ocurre en un contexto y en un discurso que destruye o falsea los significados y deniega esta transformación. La violencia adquiere características doblemente devastadoras cuando el acto de violencia es re-rotulado. La identificación, visibilización, prevención y atención de las modalidades de violencia en el empleo público, aparecen como prerrequisito de cualquier Reforma de la Administración Pública. Resulta urgente revertir prácticas - invisibilizadas y normalizadas - que ponen en riesgo la salud pública, emergen como condición necesaria para el desarrollo de la corrupción, vulneran los resultados de la gestión estatal y quebrantan nuestro sistema democrático y nuestro Estado de Derecho.