La reforma a la seguridad social en México
Resumen
Se examina la reforma de la seguridad social en México, en el contexto de la reforma económica y de la reforma del Estado. Se considera la posición actual de los trabajadores y se discute el papel que debe jugar el Estado en este proceso. Se comenta la nueva Ley del Seguro Social y sus implicaciones, haciendo alusión a los cambios en el Instituto Mexicano de los Seguros Sociales. La crisis del Estado Benefactor se manifestó en México en un deterioro de la seguridad social que afectó principalmente a los pensionados. En estas condiciones, se planteó cómo mantener los logros de la política social y cómo financiar las prestaciones sociales sin incurrir en un déficit público crónico que en el mediano plazo se traduciría en una disminución de las condiciones de bienestar de los trabajadores. El Estado Benefactor y sus instituciones daban protección a los trabajadores en un tipo de economía que paulatinamente ha dejado de existir. El avance tecnológico, las crisis económicas y el cambio en la estructura de la fuerza laboral imponen la necesidad de formular nuevas opciones para la seguridad social, que debe establecer mínimos de protección y combinarlos con la posibilidad de mejorarlos mediante la iniciativa individual. El Gobierno de la República manifestó su compromiso para conservar los principios originales de la Ley del Seguro Social, manteniendo su orientación hacia la justicia social. Igualmente, se mantuvo la decisión del Estado mexicano en cuanto a seguir siendo el garante de la seguridad social, a través del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS). Sobre esta base, la nueva Ley del Seguro Social quiere poner a disposición de los trabajadores esquemas flexibles de aseguramiento que atiendan a sus propias necesidades, capacidades y esfuerzo. Eleva los beneficios para quienes el tiempo de trabajo y ahorro sea mayor, al tiempo que conserva un mínimo actualizado conforma a la inflación. Durante 1996 el IMSS ha transformado su estructura administrativa y sus procedimientos para dar cumplimiento a las disposiciones de la nueva Ley del Seguro Social. De acuerdo con esta ley, al IMSS se agregaron instituciones cuya competencia es fiscalizar la actuación de los entes privados que participarán en el sistema de pensiones, así como sociedades mercantiles que pueden aprovechar los efectos positivos de la competencia respecto a la inversión de las reservas de los trabajadores. La nueva Ley de Seguridad Social obligó a reelaborar el marco reglamentario del IMSS, resultando en la incorporación de figuras jurídicas novedosas como el seguro de salud para la familia y la seguridad social para el campo. Uno de los mayores esfuerzos fue el que se llevó a cabo en materia informática, donde se automatizó un gran número de procedimientos y se creó el programa denominado "El IMSS desde su empresa". Se concluye que la nueva Ley del Seguro Social es una respuesta adecuada a los requerimientos del futuro, ya que establece los pilares económicos y jurídicos de la seguridad social para las generaciones venideras. De este proceso, el IMSS sale más fortalecido, con ánimo renovado y con la convicción de que desempeña una importante misión social. C.S.