Reforma del Estado boliviano. Descentralización de la administración aduanera y de impuestos internos

Abstract

Antes de iniciarse el proceso de descentralización la estructura del Estado se caracterizaba por: -El crecimiento excesivo del sector público y un paternalismo estatal que mantenía en absoluta dependencia a los departamentos, provincias y municipios. -Ausencia de participación civil en la identificación de la demanda social por servicios públicos.

La descentralización se ha planteado con base en los siguientes objetivos: Democratizar el Estado, transfiriendo facultades de decisión del nivel central de gobierno hacia los departamentos y municipios. -Lograr mayor equidad en la asignación de recursos fiscales entre el nivel central, el departamental y el municipal. -Lograr mayor participación de la sociedad civil en la toma de decisiones y fiscalización social de los actos del Estado.

El proceso de descentralización siguió la siguiente secuencia: La primera fase fue de simple desconcentración de competencias a nivel departamental. En la segunda fase se fortalecieron los Gobiernos Municipales mediante la promulgación de la Ley de Participación Popular, que transfiere competencias de los sectores de salud, educación e infraestructura vial. En la tercera fase mediante la Ley de Descentralización Administrativa del Poder Ejecutivo se transfieren las funciones de planificación del desarrollo regional a las Prefecturas Departamentales, se transfiere la responsabilidad de atender el pago de planillas de sueldos al personal de los sectores de educación y salud y se prosigue con el fortalecimiento de los Gobiernos Municipales

La descentralización de la Administración Aduanera y la del Servicio de Impuestos, está en proceso de ejecución. Prosigue la transferencia de la responsabilidad absoluta de la función de recaudación a las administraciones regionales, así como también de otras funciones de administración, manteniendo la atribución de ejercitar el control posterior por parte de la administración nacional, para verificar el cumplimiento de las metas específicas establecidas.

Para fortalecer la capacidad de gestión de la administración tributaria es preciso definir con precisión los programas operativos, su costo y garantizar su financiamiento. Para garantizar el cumplimiento de las metas fijadas se pretende reconocer y autorizar a la administración tributaria un nivel presupuestario equivalente a un porcentaje predeterminado de las recaudaciones.

En la Aduana Nacional y en el Servicio de Impuestos el nivel operativo estará desconcentrado territorialmente en las administraciones distritales. Considerando la importancia económica atribuida a los contribuyentes, en el Servicio de Impuestos se mantendrán las administraciones especiales, como la de los Grandes Contribuyentes y la administración especial para el sector hidrocarburos.