Mostrar registro simples

dc.contributor.authorVázquez Irizarry, William
dc.date.accessioned2018-09-02T06:51:37Z
dc.date.available2018-09-02T06:51:37Z
dc.date.issued2014
dc.identifier.urihttp://cladista.clad.org//handle/123456789/7789
dc.description.abstractEl proceso de descentralización objeto de discusión en este momento en Puerto Rico incluye la consideración de crear un nuevo nivel de gobierno que está siendo denominado región autónoma . El modelo propuesto descansa esencialmente en un enfoque de descentralización administrativa. Si bien se crea una unidad de gobierno regional que sería receptora de competencias que actualmente desempeña el gobierno central, no se crean cargos públicos de carácter regional sujeto a un proceso electoral. Esto es, no hay un poder ejecutivo o legislativo electo por la población de la región.
dc.description.abstractAhora bien, tampoco se opta por la designación de funcionarios desde el gobierno central. La estructura propuesta supone la creación de un ente llamado junta regional , el cual estaría compuesto por los alcaldes que integran la región, un representante del gobierno central y uno o dos ciudadanos. Este organismo serviría entonces como cuerpo rector de la región autónoma, con la autoridad para designar funcionarios que darán dirección a esta nueva unidad de gobierno.
dc.description.abstractLo descrito supone entonces que el nivel de gobierno regional no contaría con una legitimidad democrática propia, sino que gozaría de la derivada del nivel local mediante la participación y poder decisional de los alcaldes. La presentación se enfoca precisamente en examinar este modelo en términos conceptuales, prácticos y de gerencia pública. Nos proponemos estudiar formas de conciliar la creación de gobiernos regionales autónomos con la falta de descentralización política. Esto requiere examinar incluso su viabilidad política.
dc.description.abstractRecordemos que, después de todo, es común justificar una política de descentralización a base de la cercanía que permite entre la gestión pública y los ciudadanos. La teoría descansa en que esto propicia las condiciones más adecuadas para un proceso saludable de rendición de cuentas ( accountability ). Pero, ¿supone ello que el gobierno que recibe la delegación o transferencia de competencias es electo? Planteado de otra manera, ¿se sostiene la justificación democrática de la descentralización en un modelo donde no hay cargos públicos sujetos a un proceso electoral y político también regional?
dc.format.extent11 p.
dc.languageEspañol
dc.publisherUniversidad de Puerto Rico. Escuela de Derecho. Centro Multidisciplinario de Estudios sobre Gobierno y Asuntos Públicos
dc.rightsCreative Commons BY-SA-NC 4.0 Int
dc.rights.urihttp://creativecommons.org/licenses/by-nc-nd/4.0/
dc.subjectCONGRESO CLAD 19-2014
dc.subjectANALISIS HISTORICO
dc.subjectMARCO JURIDICO
dc.subjectDESCENTRALIZACION
dc.subjectADMINISTRACION LOCAL
dc.subjectGOBIERNO LOCAL
dc.subjectREFORMA MUNICIPAL
dc.subjectLEGITIMIDAD
dc.subjectTRANSPARENCIA
dc.title¿Es posible armonizar autoridad regional y legitimidad local?
dc.typearticle
clad.congressCongreso Internacional del CLAD sobre la Reforma del Estado y de la Administración Pública, 19
clad.keyMFN45809--45809
clad.key1KEY45809
clad.regionPUERTO RICO
clad.md5447817a740e825d8cd9ba54d671b602d


Arquivos deste item

Thumbnail

Este item aparece na(s) seguinte(s) coleção(s)

Mostrar registro simples

Creative Commons BY-SA-NC 4.0 Int
Exceto quando indicado o contrário, a licença deste item é descrito como Creative Commons BY-SA-NC 4.0 Int