Papel de los ministerios de justicia en la reforma del Estado

Abstract

Se describe la estructura, las funciones y los vínculos institucionales de los Ministerios de Justicia, y se consideran en particular sus relaciones con los Consejos de Judicatura en diferentes países. Se discuten nuevas alternativas propuestas para el mejoramiento de la administración de justicia, y se ubica la actuación de los Ministerios de Justicia en el marco de los procesos de reforma del Estado.

La existencia de un Ministerio de Justicia se comprueba en numerosos países, matizada por condiciones nacionales particulares que determinan ciertas características. Lo que es necesario destacar es que en todos estos países se alcanza un modus vivendi entre la Secretaría de Justicia y el Poder Judicial, que se considera imprescindible para garantizar una marcha adecuada del régimen político. En todos los casos, la defensa de la libertad individual por parte del Estado constituye un gran deber de la administración pública, a través de la actuación del Derecho. Tal es el principio vital del Ministerio de Justicia en el Estado de Derecho.

La identificación precisa de las labores de los Ministerios de Justicia en la reforma del Estado de Derecho, exige la determinación de cuáles son sus faenas actuales, que en principio han sufrido una fuerte variación con motivo de la aparición de los Consejos de Magistratura o Judicatura. Estos cuerpos colegiados han hecho replantear sustancialmente el papel de dichos Ministerios, principalmente en lo que toca a la administración del Poder Judicial, la disciplina de los juzgadores y la formación de los funcionarios de la judicatura.

En última instancia, la existencia de un Ministerio de Justicia se justifica por su capacidad de mejoramiento de la administración de justicia. Pero los Ministerios de Justicia deben enlazarse con los programas generales de reforma del Estado. Por principio, el Ministerio de Justicia puede colaborar en el perfeccionamiento y logro pleno de la noción de Estado de Derecho basado en la justicia social y en la justicia individual, así como viabilizar un programa integral de reforma de la administración de justicia.

La reforma del Estado reclame la transformación sustancial de las bases jurídicas del gobierno mismo, de modo que la expedición e implementación de nuevas leyes requiere de estudios profundos que puede realizar un Ministerio de Justicia. Un Estado en proceso de reforma demandará nuevas leyes en materias tan importantes como el derecho electoral, partidos políticos, prevención de desastres, patrimonio público, derechos humanos, participación ciudadana, contraloría, planeación, ecología y educación, entre otras.

La reforma del Estado requerirá programas que, a falta de mejor denominación, se conocen con el nombre de "desburocratización", así como la decisión de medidas de desregulación, cuya aplicación en el Estado de Derecho debe ser meditada con prudencia. En términos generales, la reforma del Estado abarca todo el panorama del régimen político en su conjunto, y comprende al ciudadano como miembro del Estado. C.S.