La influencia de los valores culturales, la participación ciudadana y las competencias laborales en el diseño de un sistema de mérito: el caso colombiano
Abstract
Basado en la experiencia, no muy exitosa, del desarrollo del sistema de merito en la administración publica colombiana en los setenta años que lleva de instaurada, la ponencia examina las razones por las cuales el sistema no ha funcionado adecuadamente. Estas razones se deben fundamentalmente a la tradición cultural existente donde en la vinculación y permanencia de los funcionarios públicos a las organizaciones estatales se tiene más en cuenta la recomendación política, el "amiguismo", nepotismo y otras costumbres de tipo tradicional. Otras razones que se esgrimen para el no funcionamiento del sistema de merito son razones de carácter político, de orden legal y finalmente las de carácter técnico. En un momento tan confuso como el que atraviesa el sistema de merito en Colombia es indispensable que sus investigadores y docentes se pronuncien a través de propuestas concretas sobre la forma de mejorar el precario sistema de personal en el sector publico. Ello es necesario porque toda organización pública requiere para su funcionamiento de un sistema de personal que garantice la eficiencia, eficacia, y transparencia de las personas y de las entidades involucradas en la vinculación, desarrollo, remuneración y evaluación del desempeño de los funcionarios. La necesidad de establecer un sistema de personal moderno en el Estado colombiano que tenga en cuenta no solamente las razones de carácter técnico sino algunos valores de carácter tradicional llevan al autor de la ponencia a presentar una propuesta que contiene cuatro elementos básicos. La estructuración de un sistema de personal que establezca la interrelación entre cada una de las partes (selección, desarrollo, remuneración y evaluación del desempeño). En la legislación colombiana estas partes están consideradas pero no están debidamente ni realmente integradas. Tampoco existe un objetivo claramente definido y su funcionamiento ha sido intermitente. La adopción de un sistema de competencias laborales aplicable a todas las partes del sistema. Las competencias surgen por la necesidad de evaluar la capacidad de emplear los conocimientos y las habilidades y destrezas dentro de un contexto social y especifico. Este es un cambio significativo pues la legislación colombiana solo contempla requisitos de carácter formal (estudios y experiencia) que poco contribuyen a mejorar la eficiencia de los empleados y de la administración. En esta parte se propone un cambio del sistema de evaluación del desempeño en donde se haría mas énfasis en la evaluación organizacional que en la evaluación individual, considerando a las organizaciones como las encargadas de llevar a la ciudadanía Bienes y Servicios de forma satisfactoria, así el porcentaje de calificación otorgado a cada entidad correspondería igualmente a cada funcionario de manera individual, lo que se traduciría en una bonificación anual sobre el salario básico o un porcentaje entre 5% y 10% de acuerdo a casos formalmente establecidos en América Latina como ocurre en Chile. Finalmente, la propuesta considera la participación ciudadana como un elemento critico para la efectividad del sistema. Se propone que las organizaciones públicas sean evaluadas con criterios de eficacia, eficiencia y efectividad y en dicha evaluación participen organizaciones ciudadanas que se crearían para tal efecto.