Liderazgo distribuido en la administración pública
Abstract
En las organizaciones del conocimiento, como lo son las que prestan los servicios públicos mayoritarios de nuestra época, la noción misma de liderazgo necesita ser repensada. El mando jerárquico ha perdido buena parte de su eficacia motriz. Puede decirse que los directivos están, más que nunca, en manos de los expertos. No se trata sólo del manejo de la tecnología o los procesos, sino incluso del propio diseño y ejecución de la estrategia. Diferentes expresiones de liderazgo tienden a surgir en puntos diversos de la organización, de un modo no siempre coincidente con las estructuras formales. ¿Son manifestaciones compatibles con la necesidad de trabajar de forma cohesionada? ¿Qué elementos caracterizan a estos nuevos modelos de liderazgo? ¿Qué tipos de directivos son necesarios para hacerlos posibles? Para responder a estas cuestiones, primero se delinearan los contornos del liderazgo, un concepto escurridizo que plantea numerosos interrogantes, disyuntivas e interpretaciones, y se abordará el liderazgo distribuido en si mismo. Este modelo pone en marcha un proceso cuyas mayores probabilidades de éxito dependen del potencial de transferencia del liderazgo del directivo hacia otras personas, y de las características de sus colaboradores. Esta forma de entender las relaciones del liderazgo distribuido se basa en el talento, individual y del equipo, y en la confianza.