La evaluación del desempeño en el Estatuto Básico del Empleado Público y las cualificaciones profesionales
Abstract
La consecución del Estatuto Básico del Empleado Público, que desarrolla un mandato constitucional, ha sido una de las reivindicaciones básicas y constantes de las Organizaciones Sindicales españolas, la plasmación de un marco jurídico para el desarrollo de la función pública española ha sido una demanda básica de los empleados públicos. Era y es una "asignatura pendiente", una reforma de las administraciones públicas para atender la demanda social absolutamente justificada de dotar a los servicios públicos de agilidad, eficacia, transparencia, continuidad, neutralidad y responsabilidad. Y que pudiera abrir a los empleados públicos una "vía" de futuro profesional dentro de su trabajo en la AA.PP. En definitiva, avanzar en lograr una mejora de los servicios públicos. Uno de los objetivos que se persigue con el Estatuto Básico del Empleado Público (EBEP) es reformar la función pública española garantizando un mejor servicio a los ciudadanos y generando expectativas de futuro para los empleados públicos, no podemos dejar de lado que en una sociedad moderna que busca unos servicios públicos de calidad, el capital humano se consolida como el mejor activo de la función pública y el conseguir un empleado público más comprometido con su tarea y con su servicio público es imprescindible para buscar la excelencia del servicio público. El EBEP puede ser la piedra angular e imprescindible para consolidar un modelo de función pública que satisfaga a la sociedad, profesionalice y modernice la administración y recupere la motivación y la imagen social de los empleados públicos. Dentro de esa búsqueda de la excelencia el EBEP considera la Evaluación del Desempeño de los empleados públicos como un elemento fundamental de la nueva regulación. La Evaluación del Desempeño se consagra como derecho del empleado público en el artículo 20 del Capítulo II, del Título III del EBEP. El EBEP recoge "El sistema de empleo público que permite afrontar estos retos es aquel que hace posible atraer los profesionales que la Administración necesita, que estimula a los empleados para el cumplimiento eficiente de sus funciones y responsabilidades les proporciona la formación adecuada y les brinda suficientes oportunidades de promoción profesional. Al tiempo que facilita una gestión racional y objetiva, ágil y flexible del personal, atendiendo al continuo desarrollo de las nuevas tecnologías". El EBEP comparte la misma filosofía que el desarrollo de las cualificaciones profesionales, al basar la promoción de los Empleados Públicos en el desarrollo de las competencias profesionales. Las cualificaciones profesionales se estructuran en el Catálogo Nacional de Cualificaciones Profesionales.